Donde nos lleve la palabra
Ahora que estoy aquí, y que me siento bien por estar con ustedes. Ahora que aquí me siento vivo, aprovecho para felicitar el nuevo siglo a este diario. Aprovecho la ocasión para felicitar a quienes confiaron en él, a quienes le botaron, a quienes le dirigieron, a quienes día tras día le dieron vida en el taller. Aprovecho el momento para congratularme con este vehículo que nos acerca, que nos comunica, que se llena de color y de nuevas historias pensando en Palencia y su provincia; ahora y aquí, para que no se rompa esa trayectoria de fidelidad y de compromiso hacia esta tierra. Yo nací con él. Y nací con Antonio Álamo Salazar. Y crecí con la “Solana palentina” de Gonzalo Ortega Aragón, que mi padre leyó y resumió de tarde en tarde a toda la familia. “Cómo escribe este tío” –me dice hoy, cuando nos vemos. Yo nací con Félix Buisán Cítores, maestro y periodista, a quien conocí personalmente en Cervera de Pisuerga, formando parte como jurado del Festival de Canciones y Bailes