Esperando al rey
Ojeando un poco en redes y medios de comunicación he visto opiones para todos los gustos. Gente que ha abandonado la lectura antes de llegar a la mitad, personas que se sienten defraudadas por la historia que cuenta y una mayoría de lectores que se muestra satisfecha con esta irrupción en nuestra historia de un famoso humorista, pero sobre todo de un paisano de derecho, que ha removido la historia actual bajo los cimientos de la historia vieja. Que nos ha romanizado un poco a todos, que nos ha robado un poco los sentidos por ese amor que se le nota pregona y siente tanto hacia Aguilar y sus contornos. Estamos en el mismo barco, tal vez uno en la proa y otro popa, confundidos por tanta belleza como se muestra mires a donde mires, preguntándonos a veces si no estará fuera de sí tanto entusiasmo, si no estaremos confundidos, si no seremos bichos raros que van por ahí pregonando a voz en grito una tierra que, cosa rara, muere, como sus gentes, cuando es obvio que la tierra siempre