El legado de César

En 2010, el editor Wifredo Román me propone añadirle un texto a más de un medio centenar de imágenes tomadas a principios de 1900 por César González, hijo de José González Zuloaga que procedía de la localidad cántabra de Mazcuerras.
Familia que alcanzó en San Salvador un notable protagonismo al ser propietarios del molino y de la Venta Campa. La familia de José contaba, entre sus numerosas posesiones, con una finca en La Valdavia (Tablares), donde nacieron sus tres hijos.


De ideología progresista-liberal, César cursó estudios, probablemente, en Madrid, donde contrae matrimonio en 1903 con Agustina Tejerina, natural del vecino pueblo de El Campo. Tuvieron diez hijos y murió relativamente joven, el 6 de febrero de 1933, a los 60 años.

Pero todavía llegó a tiempo de escribir unos diarios entre 1905 y 1925, de donde se deduce su gran capacidad de trabajo. En sus diarios cuenta que muele, riega, cava, hace las curas a su madre, que tenía ulceras varicosas en las piernas; baja a Cervera o va a Aguilar a comprar trigo; realiza instalaciones de maquinaria; viaja a Santander y a Bilbao. Entre ese cúmulo de curiosidades se sabe que compró un coche al que sus hijos llamaban "el pedos", porque la matrícula era el número 2 de Palencia. Pero lo que nos fascina de aquel mundo, lo que toca el corazón, es la colección de aquellas imágenes que suponen, con toda probabilidad, el primer reportaje gráfico realizado en La Pernía, y donde podemos recrearnos en la dureza del invierno, la matanza, la vestimenta, las tradiciones, episodios cotidianos que para cualquier otro hubieran pasado desapercibidos. Un regalo para la vista que pueden encontrar en la editorial Aruz, "Colección de Historias de la Montaña Palentina".

De la sección "La Madeja", para Diario Palentino, 2017

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