“Desafío a poetas y pensadores, a contables y mercaderes, a sabios e ignorantes, a teólogos y moralistas a que encuentren un tesoro más basto, al menos entre lo mirable. Que traigan hasta nuestra percepción un solo caso de alguien de este mundo que sólo aporte y sume, que nada dañe o reste...”
Extracto del artículo que forma parte del libro "Ver dos veces las cosas"




