Un día en Fuentes de Nava
Por lo que he leído estos días sobre el patrimonio mudéjar, más extendido en Palencia de lo que nunca imaginamos, han desaparecido muchos edificios. Sabemos que lo que hay es insignificante, si se compara con Sahagún o Toledo, pero nunca es tarde para recuperarlo y promoverlo. Uno habla, regularmente, de lo que conoce, de aquello que le mueve por cercanía, por necesidad, por costumbre. Hablar del románico era una necesidad vital habiendo nacido en San Salvador de Cantamuga, donde presumimos de una de las mejores espadañas que este arte nos deja en Palencia. Era casi una obligación promocionarlo con todos los medios al alcance, pero sin olvidar otros rincones de esta tierra que atraparán al caminante. A primeros de mayo de este año, viajé a Tierra de Campos. Quise entender entonces el Universo al que hacen referencia muchos paisanos. A 25 km de la capital se encuentra Fuentes de Nava “lugar de fuentes”, antes de Don Bermudo, al que se le añade en 1872 el anexo de “Nava”, pues se