Caballo de Coches
"Agosto, frío en el rostro". Así lo acredita nuestro viejo refranero. Pero tampoco los refranes, con toda la carga de raciocinio que dispensan, valen para todo y para siempre. Por ejemplo, para el pasado mes de agosto, bien podríamos introducir un cambio que no alarmaría a nadie. "Agosto, achicharramiento en el rostro". O acaloramiento, o sofoco, o despiste de las témporas o calabazas de la capa de ozono. Una cosa parecida y en la que no intervienen los proverbios sino los hombres, es la publicidad. Viene el curioso título para entender la diferencia tan enorme que hay de la promesa al hecho. El día 20 de agosto, en la sección de Castilla y León de este diario, en el centro de dos páginas, aparecía la colegiata del siglo XII de San Salvador de Cantamuga. Ángel Sancho Campo, que entiende de altares, siente predilección por el altar de esta iglesia, construido con piedra natural, labrada por maestros canteros. Apoyado en siete columnas delanteras y otras tanta