Akuna Matata
Mufasa y Sarabi gobernaban con sabiduria aquella tierra. Era una tierra fértil, donde nunca faltó el ingrediente de la intriga y un hermano salvaje. Como en los cuentos, quienes ahora dominan la leyenda, o aquellos que pueden tener mejor acceso a modificar el final de la historia, son los alcaldes, los presidentes de las distintas sociedades, por pequeñas que sean... los cazadores, los pescadores, los comerciantes, y así, sucesivamente, estos pequeños colectivos, estos pequeños cargos, (a veces ignorándolo) desprenden un enorme poder que bien utilizado puede contribuir, y de hecho contribuye, a las mejoras y el acondicionamiento de estos pueblos. Pero como en el cuento, nuestra gente parece encontrar una prohibición al hecho de traspasar los límites del Condado. 'No debemos bajar allí'. 'Es muy peligroso'. 'Allí se vive de otra manera'. 'No entenderán nuestra forma de vida'. Alguna vez el alcalde sortea previa cita el cementerio de elefantes y ac