Leer y comprender
Un libro es un regalo. Cualquier libro por pequeño e insignificante que parezca, va impregnado con el sentimiento de un autor, muchas veces anónimo, que generalmente escribe, como los antiguos, por amor. En todos los casos, el dinero, la fama o el injusto olvido vienen después. Sentado este precedente y con el respeto que me merece la obra y, sobre todo, la persona que está detrás, conviene hacerse algunas consideraciones en aquellos libros que hablan de la montaña palentina. Cada quien es libre de hablar o de escribir de lo que le plazca, pero hacerlo por capricho de una tierra a la que sólo se la conoce por referencias, no me parece serio. Todos los autores que han soslayado esta premisa, y se han referido a nosotros incitados por un efecto de atracción, han caído en la trampa, se han volcado en excesivas referencias a otros autores, vivos o muertos, y han confundido cantidad de cosas: vocabulario, enclave, citas, términos que son la esencia y el baluarte nuestro. Por ejem