Que hable Alejandro
Lo que te descoloca de verdad es el silencio. Hablando o escribiendo uno comete errores, orienta o desdibuja una situación para la que cada uno encontró un apósito válido; trastoca o rompe la idea que otros tuvieron sobre la misma cosa. Escribiendo o hablando, uno se decanta por algo o por alguien. "Hablando se entiende la gente" –apostilla el vulgo–, aunque no siempre. Lo cierto es que, cuando alguien calla, nadie sabe dónde otorga, o lo que le preocupa, o lo que a su juicio debe preocuparle por el cargo que desempeña. ¿Cómo y hasta dónde debe preocupar la instalación de nuevas empresas en la zona norte? Esa es la pregunta a la que deben respondernos las autoridades de los pueblos donde van a instalarse. Mitchel Cohen, en un largo y apasionado ensayo sobre residuos tóxicos y el Nuevo Orden Mundial, se refiere a ello como una industria lucrativa, una forma intencionada de cercar tierras y recursos. En un lenguaje demasiado técnico, Cohen lo analiza como